A medida que los niños regresan a la escuela, puede ser un verdadero desafío para los padres y educadores descubrir cómo motivar a sus estudiantes para que crezcan y aprendan.
Al comprender el estilo de personalidad DISC de tus estudiantes (o hijos), puedes saber qué los motiva y cómo conectarte mejor con ellos.
Aquí hay algunos consejos útiles para usar los principios del estilo de comportamiento de DISC en sus clases o en el entorno de la escuela en el hogar:
Los estudiantes con un “D” alto aman los desafíos
El estudiante con un “D” alto es de ritmo rápido, de voluntad fuerte y decisivo. En un entorno educativo, a menudo están orientados a objetivos, son trabajadores y no se desaniman fácilmente. También son dominantes y pueden desafiar a la autoridad, son extremadamente competitivos y ferozmente independientes. Aquellos que intentan enseñarles pueden encontrar que este estilo empieza la tarea antes de terminar de escuchar las instrucciones.
Para motivar a un estudiante con alto “D” hacia el aprendizaje y el crecimiento:
- Dales un desafío y hazlo divertido.
- Pídeles que establezcan una meta que alcanzar.
- Permíteles ser independientes y flexibles para resolver las cosas por sí mismos.
- Reconoce sus logros.
- Permíteles tomar decisiones.
Los estudiantes de alto “I” prosperan en el aprendizaje en equipo
El estudiante de alto “I” es creativo, muy extrovertido y tiene mucha energía. En un entorno educativo, a menudo se les describe como una persona que realiza múltiples tareas, un jugador de equipo y un ritmo rápido. También pueden desenfocarse, distraerse fácilmente y hablar compulsivamente. Quienes les enseñan pueden pensar que no se toman las tareas lo suficientemente en serio y, a menudo, les describen como un “payaso de clase”.
Para motivar al estudiante con un alto “I” hacia el aprendizaje y el crecimiento:
- Permíteles alternar entre variedades de tareas.
- Permíteles sacar su energía.
- Permíteles entretenerse como parte de su aprendizaje.
- Mantén el ambiente alegre y amigable.
- Haz las cosas prácticas e interactivas.
Los estudiantes con un “S” alto adquieren mediante la enseñanza
El estudiante con un “S” alto es observador, competente y paciente. A menudo se describen como buenos en el seguimiento, respetuosos de la autoridad y tranquilos en un entorno educativo. También pueden ser resistentes al cambio, bloquearse cuando se sienten abrumados y resentirse cuando se les obliga. Aquellos que tratan de enseñarles pueden encontrarlos apáticos si se les presiona demasiado.
Para motivar al estudiante con un alto “S” hacia el aprendizaje y el crecimiento:
- Pídeles que te enseñen a ti o a otra persona. Esto les ayudará a sentirse necesitados.
- Asegúrate de que estén en un entorno con otras personas que estén entusiasmadas con el aprendizaje.
- Ayúdalos a sentirse seguros de sus habilidades.
- Desafíalos a crecer, pero no los obligas.
- Mantén el ambiente consistente y propicio.
Los estudiantes de “C” alto descubren haciendo preguntas
El estudiante con un “C” alto está orientado a los detalles, es analítico y lógico. En un entorno educativo, a menudo se los describe como seguidores de reglas concienzudos que son precisos y precisos. También pueden postergar las cosas, ser perfeccionistas y no tomar bien las críticas. Aquellos que tratan de enseñarles pueden encontrarlos inflexibles.
Para motivar al estudiante con un alto “C” hacia el aprendizaje y el crecimiento:
- Permíteles profundizar en sus intereses.
- Elogia su arduo trabajo.
- Permíteles procesar las cosas en su propio tiempo.
- Asegúrate de que sepan exactamente lo que se espera de ellos.
- Permíteles crear sistemas y organizarse.
Comprender estos rasgos clave de la personalidad y los factores motivacionales puede impactar positivamente la educación de los estudiantes mientras se establece un amor por el aprendizaje y el crecimiento que durará toda la vida.
Las evaluaciones DISC te permiten aplicar el modelo DISC a tus jóvenes estudiantes para animarlos y motivarlos.
Test adulto (desde los 12 años)